A pesar de ser material
del claro olvido,
y encontremos nuestras miradas en espejos
largos y viejos espejos de la historia,
sentiremos los trazos de alguna melodía
encandilando el alma nuevamente,
haciendo a la mala y agria muerte
un lugar donde finalmente podremos descansar,
sin paz,
pero juntos.
Escribe lo que se leerá,
se recitará
se cantará,
en un presente sin preocupaciones por él
ni por sus cuestiones
ni sus gustos
ni sus necesidades
ni sus distintas voces hospitalarias.
Canta lo que se escribirá,
se leerá
se recitará,
en un presente sin preocupaciones por mi
ni por mis cuestiones
ni mis gustos
ni mis necesidades
ni mis distintas voces edulcoradas.
En el aire escribimos
con talentos nuestros,
suaves notas rojas y melancólica tinta
garabatos opacos de luces que callan
y aunque lo hiciesen para defendernos hoy
en el fondo respiran preocupación
y en su vituperante ocupación,
rezan a unas frías manos que se complementan,
con alegría,
ante nosotros.
Es normal vivir eternamente enamorado de gestos.
del claro olvido,
y encontremos nuestras miradas en espejos
largos y viejos espejos de la historia,
sentiremos los trazos de alguna melodía
encandilando el alma nuevamente,
haciendo a la mala y agria muerte
un lugar donde finalmente podremos descansar,
sin paz,
pero juntos.
Escribe lo que se leerá,
se recitará
se cantará,
en un presente sin preocupaciones por él
ni por sus cuestiones
ni sus gustos
ni sus necesidades
ni sus distintas voces hospitalarias.
Canta lo que se escribirá,
se leerá
se recitará,
en un presente sin preocupaciones por mi
ni por mis cuestiones
ni mis gustos
ni mis necesidades
ni mis distintas voces edulcoradas.
En el aire escribimos
con talentos nuestros,
suaves notas rojas y melancólica tinta
garabatos opacos de luces que callan
y aunque lo hiciesen para defendernos hoy
en el fondo respiran preocupación
y en su vituperante ocupación,
rezan a unas frías manos que se complementan,
con alegría,
ante nosotros.
Es normal vivir eternamente enamorado de gestos.
2 comentarios:
un lugar donde finalmente podremos descansar,
sin paz,
pero juntos.
escrito con melancólica tinta...
bello, señor Holmes.
Sí, muy bello. Demasiado, diría.
Conejitos Asesinos.
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